Esta es una columna de RUEDA

Se los digo así, mi columna es algo sencilla y escrita con mucho amor, nada más. De compras por Santiago. Hace unos días recibí un mail de Arturo Bazo (un ex compañero de colegio) en el que me pedía un favor, quería que fuera a un sec-chop (o como se llamen) y que le comprara un consolador, que el después me reembolsaba la plata y que se lo mandara por encomienda a Ovalle (ahí esta viviendo ahora) Así que partí a buscar un sex shop, llegué a uno y entre, lo primero que vi fueron unas películas pornos, empecé a mirar las carátulas, y para ser sincero, me empecé a calentar bastante, después de como 15 minutos mirando se acercó un tipo a atenderme, me pregunto que buscaba, entonces me dio vergüenza y le dije que estaba mirando nomás, él se fue y yo seguí mirando las carátulas pero por dentro pensaba "tengo que atreverme, no le puedo fallar, él fue mi amigo y ¡me necesita!", así que me acerqué al mostrador, respire hondo y le dije al tipo que andaba buscando un consolador, él me miro de arriba a abajo y me sonrió, me dijo que se llamaban vibradores, que existían distintos tamaños, colores, formas, texturas e incluso sabores y olores, yo me quede en silencio por un rato y le volví a decir que quería un consolador, el se rió y me cerro un ojo, dijo que se notaba que era la primera vez que compraba uno, yo le dije que si pero que no era para mi, era para un amigo, el dijo que no le mintiera, que disfrutar con vibradores no me hacia homosexual, yo le dije que claro, que tenia razón pero no era para mi, el no me hizo caso y me empezó a contar sobre la primera vez que se metió un consolador en la raja, que tenia 11 años y lo había encontrado en la pieza de su tía, al principio le dolió pero después le empezó a agarrar el gustito, me pregunto si me había dolido la primera vez que me metí uno, yo le dije, una vez mas, que nunca había hecho eso, que no era para mi, él como que se enojó y sacó muy serio una caja llena de consoladores, dijo que los mejores y los que él podía recomendar, porque los había usado, eran "Mr. Mouse" y uno importado de Holanda, el que se llamaba Mr. Mouse era completamente morado, tenia el detalle de unas venas y un par de bolas, al final terminaba con una especie de pene chico que tenia forma de ratón, yo le pregunté al tipo que atendía para que era el ratón, el me dijo que el ratón lo metías en el ano y que daba, según él, unas pequeñas y muy placenteras descargas eléctricas. El segundo era importado de Holanda, era rosado y la gracia que tenia era que estaba hecho 100% de material orgánico reciclado (no me atreví a preguntar a que se refería con material orgánico) y él me garantizaba que el producto no me produciría ningún tipo de alergias o comezón en el ano, los dos costaban casi lo mismo, así que me puse a pensar en Bazo, en cual de los dos consoladores le gustaría mas, como yo no me decidía nunca el tipo me dijo que si quería podía pasar a una habitación a probarlos, yo lo mire aturdido, no supe que contestar y a causa de los nervios y para salir de la situación le dije que bueno, me hizo pasar a una pieza chiquitita y cerró la puerta, ahí estaba yo, solo y con los dos consoladores, uno en cada mano, el rosado en la derecha y el del ratón, que te metías en el culo y te electrocutaba, en la izquierda, entonces me pregunté varias cosas, ¿cuánta gente habrá probado ese mismo consolador que yo tenia en mi mano?, ¿desde cuando Arturo se había convertido en un transexual?, ¿Cómo van a financiar el plan AUGE?, ¿Porque la Católica no pierde?, etc. Pasaron unos minutos y salí, le dije que me gusto mas el morado, él se rió y me dijo "¿por la lauchita verdad?", Sonreí y le dije que si, le pagué y me fui con el consolador en la mochila. Fdo Rueda, desde San Carlos de Itihue